Contenido principal del artículo

Autores

Una vez que se han perdido, las raíces son irrecuperables. En vano el
desarraigado permanece varias horas parado en una esquina, junto a un
árbol, contemplando de soslayo esos largos apéndices que unen la planta
con la tierra: las raíces no son contagiosas ni se adhieren a un cuerpo
extraño.
Cristina Peri Rossi
Los desarraigados
A Wilson, por supuesto.

Carolina Romero, Universidad Industrial de Santander

Docente Escuela
de Idiomas
Universidad Industrial
de Santander

Romero, C. (2017). La voz del migrante en la historia argentina. Reflexiones sobre la novela Santo oficio de la memoria. Hojas Universitarias, (61), 150–155. Recuperado a partir de https://editorial.ucentral.edu.co/ojs_uc/index.php/hojasUniv/article/view/784

Descargas

Los datos de descargas todavía no están disponibles.
Recibido 2017-05-05
Aceptado 2017-05-05
Publicado 2017-05-05